Y ahora soy yo contra el mundo, ya las palabras se las llevo el viento. Ahora me tomo un pequeño descanso para recuperar mi interior, para levantar un nuevo muro. Tengo nuevas ilusiones, no cierro ninguna puerta. Con pequeños saltos encontraré mi destino. Ahora es mejor apagar las luces, ya es demasiado tarde para cuentos.
Tengo las promesas en la garganta, no puedo creer como hay personas que siguen creyendo que todo es para siempre. Pienso escapar a la realidad. Huir de un flechazo. Las pequeñas razones que me quedaban, las olvidé.
Extrañar los días que apenas llegabas a ver, la tormenta lo cubría todo.

Me cuestan las palabras, o ver amanecer. Dar sujeto a mis frases para dar sentido a todo esto, a lo que es vivir en este mundo. Y es que existen momentos en los que olvidare sin querer. No voy a mirar el lado negativo de todo eso, si no el positivo. Voy a enseñar que por nada en este mundo merece la pena sufrir. Que los momentos malos siempre pasan, que los buenos llegan siempre. Que noto como me cuesta respirar cada vez que me paro a pensar.

 

mi desilusión de saber que los príncipes azules con el tiempo desaparecen. Diré hoy que no me volverá a pasar, pero no es cosa mía.